Ciencia para impacientes

viernes, diciembre 18, 2009

FORO ENSAYA 2009: Contar la ciencia. Contar con la ciencia.

El mundo está en continua transformación motivada por los avances de la ciencia y la tecnología. En el horizonte cercano del 2050 las nuevas fronteras entre la vida y la muerte, lo natural y lo artificial, entre otras, necesitarán ir acompañadas de un desarrollo social y una opinión pública con cultura científica que sepa asimilarlas, criticarlas y utilizarlas.

En este contexto, el pasado 20 de noviembre se celebró en la Casa de los Periodistas de Logroño la presentación del libro “Un breve viaje por la ciencia” que recoge los quince mejores trabajos presentados a Ensaya’08, IV Certamen “Teresa Pinillos” de ensayos de divulgación científica y humanística. Aprovechando esta ocasión, también tuvo lugar la mesa redonda “Contar la ciencia. Contar con la ciencia”, que contó con la asistencia de numeroso público. En la mesa redonda, dedicada a debatir los retos y oportunidades de la divulgación científica en español, participaron Pedro Campos, en representación de la Real Sociedad Española de Química; Rosario García, decana de la Facultad de Ciencias de la Universidad de La Rioja; Malen Ruiz de Elvira, periodista de El País y jurado de Ensaya’08, y Dolores Fernández, directora de la Casa de las Ciencias de Logroño.

En nuestros días, la ciencia está detrás de prácticamente todo lo que nos rodea. Noticias sobre alarmas sanitarias como la gripe A, sobre el cambio climático, sobre crisis energéticas, sobre medicamentos milagro, etc. requieren que el ciudadano disponga de información científica comprensible y rigurosa para que pueda formar su propia opinión de manera crítica. A este nivel, la divulgación y la comunicación de la ciencia adquiere un valioso papel educativo y cualquier esfuerzo en acercar la ciencia resulta inestimable. Los medios de comunicación juegan un papel esencial en este acercamiento y también la propia ciencia debe estar sujeta a su autocrítica. La mesa trató de reflejar la percepción sobre este tema, tanto desde el ámbito científico como desde el ámbito de los medios de comunicación y los museos de ciencia.

Los científicos deben enfrentarse a menudo a la pregunta “¿y esto para qué sirve?”, transmitiéndose muchas veces un mensaje de “eso es una perdida de tiempo”, tal y como señaló Pedro Campos. Además, la imagen que se presenta de los científicos en el cine y la televisión suele tener connotaciones negativas al relacionarles con el origen de peligros medioambientales, de graves amenazas víricas, o con la creación de temibles armas que acaban en manos de terroristas. La ciencia, además de argumento desfigurado para las películas más taquilleras, también es cultura y por ello, merece un espacio destacado tanto en los medios de comunicación como en los planes de estudios de la educación básica y superior. Conocer algo tan cotidiano como el funcionamiento de un microondas, por ejemplo, puede ser una experiencia muy gratificante y que estimula el gozo intelectual del ciudadano más profano.

miércoles, diciembre 02, 2009

Copenhague: La hora de los valientes

[Artículo publicado en el diario La Rioja con fecha 29 de noviembre de 2009]


Copenhague se convertirá en el principal foco de atención mundial durante los próximos días. Los principales mandatarios del planeta se reunirán del día 7 al 18 de diciembre en la capital danesa para hablar sobre cambio climático. Es hora de renovar el protocolo de Kyoto con otro acuerdo que deberá entrar en vigor a partir de 2012. También es hora de ver el compromiso real que tienen las distintas naciones en afrontar y luchar contra la crisis medioambiental que se nos viene encima.

Para que se hagan una idea del tipo de crisis a la que nos enfrentamos mencionaré tres noticias que han sido publicadas en distintos medios de comunicación durante el último mes.


Primera noticia: “El Ártico amenaza con fundirse por primera vez en quince millones de años”. Investigaciones en los sedimentos del fondo oceánico de esta región han demostrado que la parte central del Ártico ha estado permanentemente helada durante todo ese periodo. Sin embargo, la reducción de cobertura helada que se está produciendo en los últimos años hace suponer que nos quedan unos veinte veranos para ver su deshielo completo. No pregunten dónde estaba el ser humano la última vez que ocurrió este suceso. Simplemente, no estábamos.

Segunda noticia: “Las perspectivas de supervivencia de los corales se antojan tan escasas que los científicos ya han empezado a congelar muestras para salvar a estos organismos de su total desaparición”. Los científicos aseguran que la desaparición de los corales durante los próximos cien años es inevitable aún alcanzándose las mejores previsiones de reducción de emisiones de gases invernadero. Así que, al parecer, hablamos de un ecosistema entero sentenciado a muerte. Recordemos que los corales son uno de los ecosistemas que albergan mayor biodiversidad y que son refugio de multitud de peces jóvenes que no se adentran en aguas abiertas hasta alcanzar un tamaño que les haga menos vulnerables. Por si fuera poco, se estima que sirven de fuente de ingreso, alimento y protección a quinientos millones de personas a lo largo de todo el planeta.

Y tercera noticia: La concentración de gases contaminantes en la atmósfera alcanza su nivel más alto”. Según Michel Jarraud, máximo responsable de la Organización Meteorológica Mundial, dependiente de la ONU, esta tendencia conduce a los escenarios más pesimistas acerca del aumento de las temperaturas en el planeta, entre un 2’4 y un 6’4º C para final de siglo.