Ciencia para impacientes

lunes, julio 09, 2007

Calentamiento global: se acabaron las excusas

Luces de La Tierra desde el espacio

Cada vez hay menos dudas acerca de quién está detrás del calentamiento global que La Tierra está empezando a padecer. A principios de año, el IPCC (Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático) hizo público su último informe y ya lo dijo bastante claro: de acuerdo con el conocimiento científico existente actualmente, los únicos posibles responsables de este fenómeno climatológico son los gases invernadero liberados por el ser humano. Y las evidencias que atestiguan esta afirmación siguen llegando. La semana pasada, un nuevo estudio científico publicado en la revista Proceedings of the Royal Society A y desarrollado por los climatólogos Mike Lockwood, del laboratorio Rutherford Appleton de Chilton (UK), y Claus Fröhlich, del Centro Mundial de Radiación de Davos (Suiza), ha demostrado que el calentamiento que se ha producido desde 1985 no puede ser debido ni al incremento de radiación solar ni a variaciones en el flujo de rayos cósmicos recibidos.

El trabajo de estos dos investigadores consistió en analizar datos sobre la radiación solar recibida durante los últimos cien años y buscar correlaciones entre ésta y temperaturas medias globales de La Tierra. Su estudio, que parece consistente ya que no tuvieron problemas en identificar los conocidos ciclos de 11 años de duración producidos por las manchas solares, establece que durante este periodo el punto máximo de actividad solar se dio entre los años 1985 y 1987. Desde entonces, la radiación solar y la intensidad de los rayos cósmicos recibida por nuestro planeta han seguido una trayectoria contraria a la esperada si fuesen los causantes del calentamiento global.

Según el IPCC, son tres los factores fundamentales que provocan los cambios climáticos; modificaciones en la radiación solar recibida, por ejemplo debido a las variaciones orbitales de La Tierra (véase los ciclos de Milankovitch), cambios en la fracción de radiación solar que es reflejada (la actividad volcánica tiene un importante papel en este punto) y variaciones en la cantidad de gases invernadero de la atmósfera. En los últimos cien años, en los que la temperatura global de la superficie del planeta ha aumentado 0’74ºC, sólo el tercer factor ha tenido una variación significativa. La quema de combustibles fósiles y la deforestación que ha acompañado a nuestro progreso tecnológico ha elevado la concentración de CO2 atmosférico hasta las 379 partes por millón (ppm), era de unas 275 ppm al comienzo de la revolución industrial, y otro tanto se puede decir de otros gases invernadero como el metano o el ozono troposférico.

Cada vez quedan menos dudas; el ser humano está detrás del calentamiento global y, por tanto, también tiene la llave para mitigar su impacto. Como ya hemos comentado en este foro en otras ocasiones, el modelo energético basado en los combustibles fósiles debe ser revisado ya que es insostenible a medio plazo. Pero no es lo único que habremos de cambiar. También deberemos modificar nuestra actitud: aprender a ser menos voraces, gastar menos, no despilfarrar recursos que tienen un valor mucho mayor que su coste monetario...


David Sucunza

Categoría: Ciencia, Noticias, Ecología